Despertar

UNA FAMILIA

I. - HERMANAS

Un día, apenas habíamos entrado en el salón, Eugenio preguntó:
-Señor, ¿qué diferencia hay entre una provincia y un territorio nacional?

El maestro contestó:
-La siguiente: los habitantes de una provincia eligen a sus mandatarios; en cambio, los gobernantes de los territorios son designados por el Poder Ejecutivo nacional.
Pero eso no es lo fundamental -continuó el maestro-. Cada provincia tiene su propia Constitución, que no puede estar en contra de la Constitución Nacional, y maneja sus propios bienes.
Sus producciones dependen de su extensión, clima y riquezas naturales, y el aprovechamiento de las mismas, de la habilidad de sus gobernantes.
En cuanto a los territorios, el gobierno nacional se ocupa de su atención y provee a sus necesidades.
Luis interrumpió:
-Como hace un padre con sus hijos menores...
-Eso es. Y como si todas fueran hermanas de una gran familia. Algunas, las provincias, ya mayores, y los territorios, que todavía no han alcanzado esa mayoría de edad.
-¿Y los territorios pueden llegar a ser provincias? —insistió Luis.
-Sí, mas para ello deben reunir algunos requisitos legales, alcanzar un número determinado de pobladores y, sobre todo, deben tener la suficiente riqueza como para poder desenvolverse solos,
Me gustó tu frase, Luis. De modo que podemos