El hada buena

América, tierra de paz

Tierra de paz, de promisión, de ayuda,
bajo cielos templados de bonanza;
canto de amor, que la bondad escuda,
corazón siempre abierto a la esperanza.

Eres más grande aún que la quimera
que en sueños vio el sublime navegante;
eres la joya de la tierra entera,
engarzada en el mar como un diamante.

Es tu nombre ideal, de los que quieren
vida apacible, de placeres sanos,
y te traen un presente, los que vienen
con sus hijos, tomados de la mano,

Ruth Africa F. de Dupuy

Día de la Lealtad Popular

El Coronel Perón, había conquistado el corazón de los humildes.
Y no era para menos. En su despacho de la Secretaría de Trabajo y Previsión había escuchado sus problemas, conocido sus sufrimientos y tratado de aliviarlos.
De pronto se tuvo la noticia de que había sido detenido en el Tigre. Evita que lo acompañaba, sintió el dolor de ver privado de su libertad a quien tanto bien había hecho.
Entonces, con energía y decisión se llegó a los centros obreros y les contó lo ocurrido. La noticia extendió rápidamente, y todos quisieron movilizarse, como una sola voluntad.
¡Era necesario rescatar al protector de los pobres!
Se organizaron columnas que marcharon a la Plaza de Mayo. Habían abandonado el trabajo y ni siquiera se preocuparon por presentarse con mejores ropas.
-Son unos descamisados —decían las clases acomodadas...
Y frente a la Casa Rosada, clamaron por Perón, hasta que lo vie-