Libro de lectura para Tercer grado (niños de 9 años). Autor: Elsa G. R. Cozani de Gillone. Publicado por Editorial Estrada en el año , durante la segunda presidencia de Perón - Páginas 180 y 181.
Un club debe tener, además de su Comisión Directiva y de los jugadores, un equipo para cada uno. Ellos no lo tenían y no querían ocasionar gastos a sus padres, trabajadores humildes. Una sola persona podía resolver el problema: Evita.
Y hacia ella fueron y le expresaron sus deseos con naturalidad, con sencillez. Una semana después Eduardo, el capitán del equipo, recibió una gratísima sorpresa: once camisetas, medias y botines. las maderas para levantar los arcos en el campito y ¡dos pelotas de fútbol!
Una vez más Evita llevó la felicidad a las almas infantiles.
SE SALVÓ
En el yacimiento se trabajaba intensamente.
Todos, cual en una competición. se esmeraban por cumplir al máximo la consigna: producir, producir, producir. De pronto, un dolor agudo, agudísimo, hizo que Venancio abandonara su puesto. Dió unos pasos y luego, sin fuerzas, cayó al suelo.
Llamado con urgencia, el médico del Yacimiento diagnosticó peritonitis: hay que operar con urgencia.
La Sala de Primeros Auxilios no contaba con las instalaciones adecuadas para una intervención de esta naturaleza. El enfermo se agravaba... De inmediato, todos recordaron la institución que acude sin demora a las demandas de auxilio. Y se hizo el pedido, angustioso, urgente. Pocas horas después un avión ambulancia transportaba al enfermo a Bahía Blanca.
La Fundación Eva Perón había hecho posible el traslado. A ella debió Venancio su salvación.