Justicialismo

TORDOS Y HORNEROS

(fragmento)

Alberto Vaccarezza.

Paisanos: toda la vida
con encendido fervor
defendí al trabajador,
y desde arriba o abajo
bregué para que el trabajo
se compensase mejor.

Mas debe sobreentenderse
que mi estímulo sincero
se dirigió por entero
al trabajador fecundo
y no al tordo vagabundo
que se disfraza de hornero.

Sólo gracias al esfuerzo
del trabajador tenaz
—he repetido, además—
el mundo prospera y gira
y no merced al que mira
trabajar a los demás.

Protejamos al hornero,
templador de voluntades,
que en las vastas soledades
ara y siembra sin resuellos
y hace cada vez más bellos
los nidos de las ciudades.

Y honremos al artesano
tesonero y productor,
al empleado cumplidor
y al incansable maestro
por quienes trabaja nuestro
magnifico Conductor.