Mensaje de luz

Corrimos los bancos hacia la derecha. Envío nota pidiendo reparaciones.

...Una de las paredes se ha agrietado. Es un peligro para estos niños, tan buenos, tan pobres.

...Cuatro meses y todavía no recibí respuesta a mi solicitud. No desespero, tal vez inicien los trabajos en vacaciones...

...Aproveché mi estada en Buenos Aires para gestionar el arreglo de "mi escuela". Me prometieron, muy amablemente, resolver el pedido "a la brevedad".

...¡Un año más! Esto es casi una tapera. Con la colaboración decidida de los niños y de algún vecino que robó horas al descanso, se hicieron algunas reparaciones... ¿Por qué habrá tanta despreocupación oficial?

...Hay deserción de alumnos: los padres prefieren retenerlos en sus casas. La escuela... casi no existe; yo la llamaría "escuela al aire libre".

...¡Al fin! Cambiaron los tiempos, vivimos una Nueva Era. Hay comprensión y generosidad en las autoridades. Conozco, por las informaciones periodísticas, las obras de la Fundación Eva Perón. Se

abren de nuevo las puertas de la esperanza. Escribo una carta, solicitando la erección la nueva escuela.

...Hoy es dia de gloria. Hemos inaugurado el nuevo edificio. Esta escuela, blanca, acogedora y cómoda será realmente el Segundo Hlogar de mis queridos niños.
De aquella tapera, símbolo de una época, apenas queda el recuerdo.
¡Gracias a Dios!