Tiempos nuevos

LOS LATIFUNDIOS

Se llaman latifundios las propiedades rurales de enorme extensión. Un solo dueño posee vastas zonas. Durante leguas y leguas los alambrados o las pircas señalan la propiedad de una sola familia. Todo cuanto encierran dichos límites — tierras, vegetales y animales — es explotado en provecho de dicha familia propietaria. Los beneficios de los lati-

fundios son excesivos para un solo dueño; por eso éste no tiene mayor interés en aumentar el rendimiento de su heredad.
En nuestro país existían muchísimos latifundios. Unos provenían de las mercedes que el rey de España había otorgado a algunas familias en tiempos de la Colonia. Otros habían sido adquiridos por aprovechados expedicionarios en las diversas épocas en que nuestros ejércitos avanzaban sus líneas de fronteras rechazando a los indígenas. Otros, en fin, fueron formados mediante compras sucesivas. Tanto unos como otros eran legítimos y legales; pero constituían un obstáculo para el progreso del país. El gobierno justicia-lista encaró el problema con decisión; por eso los latifundios hoy han disminuido enormemente.
Con esta política económica el general Perón, que tiene el apoyo de todo el pueblo, ha hecho de la Nueva Argentina una NACIÓN SOCIALMENTE JUSTA.