Forjando la Patria

maestras. A todo esto, Nidia, la encargada del botiquín, ya había llegado. Desinfectó la herida, contuvo la sangre y le aplicó un poco de tintura de yodo Luego le vendó el dedo, colocándole un poco de sulfamida en polvo.
Cuando estuvimos en el salón, la maestra nos explico el peligro de las infecciones diciéndonos:
—Los microbios viven en las suciedades. Por eso hay que mantenerse limpias, lavarse los dientes varias veces al día, lo mismo que las manos, y por la misma razón, hay que bañarse a menudo, tanto en verano como en invierno.
Una cortadura es poca cosa si no se infecta. Y muchas enfermedades pueden ser evitadas con la higiene.
Ténganlo en cuenta. Y además, feliciten a Nidia, que con tanta seguridad obró en esta ocasión.
La Patria necesita enfermeras decididas para salvaguardar la vida de sus habitantes. Por eso la Fundación Eva Perón ha creado la Escuela de Enfermeras, que tan bien ustedes conocen.