Libro de lectura para Cuarto grado (niños de 10 años). Autor: Rosalía E. Davel de Deambrosi e Irma Freddi de Bedate. Publicado por Editorial Estrada en el año , durante la segunda presidencia de Perón - Páginas 234 y 235.
CONFRATERNIDAD AMERICANA
Las naciones de América, hijas de un hogar común, sintieron al nacer idénticos anhelos; iguales eran sus sentimientos, iguales sus necesidades.
Cuando lucharon por su independencia, unieron sus armas en la cruenta brega y cuando alcanzaron su libertad siguieron hermanadas en su espíritu.
Todo tendía a su unidad política: su lenguaje, sus aspiraciones. Conspiraban en cambio contra esa noble finalidad los intereses circunstanciales que llevaron a las nuevas naciones a las guerras intestinas que suelen ser la cáscara amarga que envuelve la semilla de la libertad.
Las ideas generosas de San Martín y de Bolívar parecían echadas al olvido; aquel concepto de nosotros los americanos con que se designaban a sí mismos los hombres que luchaban por la independencia. perdió por un momento su amplio significado. Sin embargo, el íntimo sentimiento que hada de aquellos pueblos la fracción de un todo, subsistía en lo más profundo del alma colectiva.
Las necesidades, los problemas económicos de los nuevos tiempos, llamaron felizmente a la realidad a la vasta familia esparcida por todo el continente. Argentina, como en los albores de la emancipación política, encabeza el generoso movimiento.
Faltaba sólo la varita mágica que lo impulsara y ésta se concretó gracias a la acción del General Perón que, con su visión de estadista, acometió con espíritu práctico la unidad económica suprimiendo las barreras aduaneras que entorpecían el libre y pacífico comercio con países limítrofes.
Sin duda, otras naciones hermanas acogerán la invitación fraternal, y América, una sola unidad por sus sentimientos e intereses, dando un alto ejemplo a otras partes desavenidas del mundo, alcanzará pronto el inmenso porvenir que el destino le ha reservado.